"POR POCO" ES SIMPLEMENTE NADA!

Muchos de nosotros hemos usado la expresión “por poco” para expresar frustración por no haber alcanzado algo, o también la satisfacción de que algo no haya sucedido.

Esta expresión denota hechos que en un momento dado o nos salvan o nos arruinan. Por ejemplo, cuando alguien dice “Por poco me dan el trabajo”, la verdad es que simplemente no lo consiguió. En varios pasajes bíblicos vemos reflejada situaciones de "por poco" “Por poco” es una cantidad incompleta. De nada vale estar tan cerca de la salvación y al final perderse. En el infierno habrá mucha gente que “por poco” fue salvada, como el caso del joven rico (Mateo 19:16-30), quién aunque vino ante Jesús con muchas obras correctas, al final no aceptó seguirlo. Así como estos personajes tenemos muchos más en las Sagradas Escrituras y en esta oportunidad nos enfocaremos en el encuentro entre el Rey Agripa con el apóstol Pablo. (Hechos 25-26)

El rey Agripa dijo a Pablo: “Por poco me persuades a ser cristiano”, lo cual puso en evidencia que aunque fue impresionado por el testimonio y la presentación del evangelio por parte de Pablo, al final no conoció al Cristo con el que fue confrontado. El rey Agripa estuvo a punto de ser persuadido para pasar de “muerte a vida”, pero no lo hizo... Es importante que nosotros no vivamos “por poco”, y tomemos la decisión de vivir por mucho.

¿Qué diferenciaba a este preso -Pablo- con los que comúnmente eran traídos delante de estos gobernantes? Básicamente, que por más que examinaron a Pablo, como lo hizo Pilato con Jesucristo, no encontraron ninguna falta para condenarlo. El testimonio de Pablo era contundente. En este punto es sumamente importante señalar que el ser cristiano implica mucho más que conocer la Biblia de principio a fin, asistir todos los domingos a la iglesia, dar el diezmo y hacer infinidad de buenas obras. Es el testimonio que damos con nuestras vidas la prueba más contundente que el evangelio tiene poder. Los hombres podrán burlarse del trabajo que hacemos; podrán cuestionar la doctrina y la práctica de nuestra fe; podrán tratar de destruir nuestros argumentos y nuestra visión de la vida, pero jamás podrán negar la eficacia del evangelio al ver una vida transformada.

La Palabra nos revela que Agripa vio a un hombre vestido de prisionero, pero que poseía un poder que ninguno de los presentes, en sus distintas posesiones, tenía. Festo lo tildó de loco por lo que le oyó decir (Hechos 26:24); y ahora Agripa admite que las palabras de Pablo casi lo convierten al Señor.

Agripa estuvo en presencia de la luz y esta penetró en su vida, pero al final él le dio la espalda. Es lamentable ver a alguien que haya estado tan cerca de la salvación y pase a la historia con las palabras “por poco me persuades a ser cristiano”.

Muchos conocemos a personas que han estado expuestas y confrontadas con la verdad y han tomado la ruta más fácil, diciendo que no tienen tiempo, o que lo considerarán más adelante cuando resuelvan "otras prioridades" en sus vidas. Quizá nosotros mismos hemos sido “esa persona”, o somos “esa persona” actualmente... A la luz de la historia del Rey Agripa lo más triste del caso, la mayor tragedia fue y aun es: QUE ALGUIEN TENGA TAN CERCA LA POSIBILIDAD DE SALVACIÓN, SEA CONFRONTADO CON LA VERDAD Y SE PIERDA ETERNAMENTE...

"POR POCO" ES SIMPLEMENTE NADA!

Pido al Dios Todopoderoso que Su Palabra nos toque el corazón, nos abra el entendimiento y nos permitan rendir nuestras vidas ante EL.