¿QUÉ ETIQUETA TIENES?

Actualmente muchos hombres han crecido con un concepto errado de lo que significa la hombría. Ser hombre es mucho más que una partida de nacimiento que te identifica como varón.

Todos los hombres portamos etiquetas a lo largo de nuestras vidas, la primera que nos define es: "La masculinidad", esta se relaciona principalmente con la identidad sexual. El problema con esta etiqueta es que algunos hombres se limitan a quedar definidos solo en su identidad sexual el resto de sus vidas.

La segunda etiqueta, por donde todos pasamos, y algunos se quedan, es “La niñez”. Esta se caracteriza por la inmadurez y la dependencia. Actualmente existen muchos hombres que aún siguen buscando alguien que se ocupe de ellos. Que otros limpien sus desastres; no solo físicos sino los emocionales, económicos y personales resultantes de decisiones egocéntricas y necias. Gran parte de los problemas matrimoniales son producto del hombre portando aun esas dos etiquetas (macho y niño). Esta combinación genera un hombre inmaduro, dependiente e irresponsable. Por cierto, muchos de ellos se caracterizan por ser los tiranos de su hogar y ya que “como ellos son así, y no pueden cambiar”, quienes están a su alrededor llevan un vida miserable. (Este aspecto es otro tema que pronto tocaré en detalles).

Desafortunadamente el problema no solo se circunscribe al matrimonio o la familia, las consecuencias la sufre la iglesia, la comunidad y por ende la sociedad y el país.

La responsabilidad es fundamental. Si bien no podremos controlar las circunstancias de nuestras vidas, ni las de las personas a nuestro alrededor, siempre podremos controlar nuestra manera de responder y los resultados que tratamos de lograr en cada situación.

Mi padre es para mí un ejemplo de responsabilidad, constancia y dedicación. Recuerdo que siempre nos decía a todos los hermanos que en lo que decidiéramos ser en la vida tratáramos de ser los mejores. La vida no es fácil y siempre tendremos obstáculos y circunstancias adversas. La idea no es escondernos de la realidad, pero en lugar de perder el tiempo fijándonos en lo que no podemos cambiar, debemos ser responsables y actuar en lo que si podemos.

La definición de Dios de lo que es ser hombre cambia las etiquetas de varón y niño por la tercera etiqueta:"La hombría". Más específicamente la de hombría divina. Entonces, ser un verdadero hombre implica ejercer autoridad y responsabilidad junto con sabiduría y compasión.

Esto ocurre cuando el varón no solo comprende y adopta los principios y verdades de la Palabra de Dios, sino que los vive plenamente. Un hombre del Reino debe alinear intencionalmente su vida, elecciones, pensamientos y acciones bajo el Señorío de Jesucristo.

"El Señor afirma los pasos del hombre cuando le agrada su modo de vivir;

podrá tropezar, pero no caerá, porque el Señor lo sostiene de la mano"

Salmos 37:23-24

¿Y tú?, ¿Qué etiqueta tienes?