CUANDO TODO PARECE IMPOSIBLE


Durante los últimos días han estado pasando muchas cosas a nuestro alrededor que nos han sacudido, entristecido y dado razones para reflexionar. En tiempos de alegría, nos regocijamos y buscamos alabar y agradecer a nuestro Padre Celestial... en momentos de tristeza, nos acercamos ante Su presencia y volcamos nuestras angustias, temores y dudas. Sin profundizar en las circunstancias, esta es parte de nuestras reflexiones.

En ocasiones nos enfrentamos a situaciones sumamente difíciles - como relaciones familiares resquebrajadas, pérdida de un ser querido, problemas severos de salud, problemas económicos, violencia, adicciones, etc. En otros casos, a condiciones imposibles de resolver por el ser humano - como es el diagnóstico de una enfermedad incurable. Sea cual sea el caso, nuestra respuesta instintiva como cristianos es inclinarnos a los pies de nuestro Señor Jesucristo.

Si estás en una situación difícil o imposible, no olvides que en esos momentos, Él está aún más cerca de ti. Él está deseoso de que sientas su presencia en medio de la tormenta. Búscalo entre las ráfagas y los truenos y sentirás el susurro de su voz muy cerca de ti. No desmayes, ora con fe aun cuando las noticias sigan llegando negativas. Entrégale tu corazón, tu problema y déjate envolver en sus Santas manos.

Si es un familiar o un buen amigo el que está pasando por una situación extrema, una enfermedad grave o incurable, lo mas común es sentirnos afligidos e impotentes y lo más importante que podemos y debemos hacer, es orar. Si este es el caso, hazle sentir un amor genuino y sincero, recuérdale y recuérdate que no estamos solos, Dios nos consuela y nos auxilia en nuestros tiempos más oscuros. Finalmente y no menos importante, a veces la mejor ayuda es simplemente escuchar y “estar ahí.”

Como intercesor, ora con fe y aférrate a nuestro Padre Celestial, no te desanimes, pide con un corazón sincero por tu hermano, para que el Señor lo guíe, le hable fuerte y claro, le muestre SU voluntad y sobre todo que lo sostenga y derrame Su Paz en cualquier escenario. Te aseguro que esa oración también te envolverá, te dará la fortaleza para sostenerte y sostener a otros, te dará claridad para actuar guiado de la mano del Todopoderoso y recibirás paz en el camino cualquiera que sea el resultado.

El Señor siempre responde a nuestras súplicas, sea a través de un "SI", un "NO", o un "ESPERA". En cualquiera de los casos, ÉL estará con nosotros a lo largo del camino, ÉL nos abrazará y sostendrá en los momentos de temor, angustia y debilidad, ÉL nos dará la paz que sobrepasa todo entendimiento, ÉL es siempre fiel y nos da lo que es mejor y lo que nos conviene.

Tanto en tiempo buenos como en aquellos que no lo son, 

“No temas,
porque yo estoy contigo,
no te inquietes,
porque yo soy tu Dios;
yo te fortalezco y te ayudo,
yo te sostengo con mi mano victoriosa”
Isaías 41:10

Comentarios